Storytelling y turismo: el arte de contar una historia
El martes 5 de diciembre se realizó en el hotel Doubletree by Hilton de Santiago un evento llamado Transformación Digital y Storytelling en la industria turística ¿Cómo adaptarse al nuevo paisaje tecnológico?, organizado por la Cámara Chilena Norteamericana de Comercio (AmCham).
El panel de conversación fue moderado por Debbie Feldman de Turismo Chile e integrado por Myriam Gómez de Imagen de Chile, Alejandra Salinero, Gerente de Marketing y Comunicaciones de IBM; Ricardo Margulis de Valle Nevado, y el periodista de viajes Sergio Paz.
Sin embargo, la charla se centró en datos en materia digital y, tras la conversación, muchos de los presentes se acercaron a preguntarme qué es el storytelling. Paz, un destacado periodista que sigo desde que escribía en la Zona de Contacto de El Mercurio, no tuvo el tiempo suficiente para explayar con mayor detalle sobre el significado real de este término del que muchos hablan, pero pocos entienden con exactitud.
AHORA @MyriamGomez7 de @MarcaChile en panel de conversación de @AmChamChile hablando de la estrategia digital de la Marca Chile, personalizando la experiencia digital para audiencias internacionales pic.twitter.com/z93Y3g1BMC
— FranOpazo (@lavidanomade) 5 de diciembre de 2017
Qué es el storytelling
Storytelling significa contar historias, en español. Es construir un relato, una atmósfera a través de la cual se busca conectar emocionalmente con los usuarios, ya sea por escrito o de manera audiovisual.
En el mundo del marketing, el antiguo arte de contar historias es una herramienta que se aleja de la publicidad tradicional y busca conectar con las audiencias, motivarlas a actuar, a tomar decisiones, a cambiar de opinión. Persigue la atención de consumidores, colaboradores, inversionistas, seguidores.
En este escenario se unen dos mundos: storytelling y turismo, el de las historias y el de los negocios. Estos relatos buscan cumplir una meta u objetivo puntual y pueden hacer la diferencia entre una compañía cualquiera y una con significado.
A todo el mundo le gusta una buena historia
Algunas de las ventajas de utilizar storytelling en el turismo, es que a todos les gusta una buena historia. Genera confianza y muestra el aspecto más desconocido de un destino, brinda contexto a datos concretos (qué hacer, dónde dormir), establece una conexión, apela a las emociones y le da un carácter humano a un hotel o a una aerolínea, dejando el lado transaccional como un factor secundario en la ecuación: “Hay que pagar, pero lo pago con gusto”.
La gente suele olvidar lo que dijiste y lo que hiciste, pero nunca olvida cómo la hiciste sentir. Esa es la misión de una buena historia.
El marketing turístico busca emocionar al usuario, primero, tratándolo como persona y no como potencial cliente; segundo, aportando experiencias y emociones para que sienta el deseo de crear sus propias experiencias en el destino.
Dónde encontrar buenas historias
Una buena historia difícilmente se teje a la rápida. No se hace en los ratos libres. No se copia ni se inventa. Es un trabajo y, por lo tanto, es un trabajo que requiere editar, borrar, escribir y re escribir. Difícilmente —aunque no imposible— se encuentra entre los blogs de viajes, aquellas webs repletas de datos —a veces buenos, a veces llenos de errores— y donde suele ocurrir que quien escribe es el centro de la historia y no el destino.
Lo dijo el periodista Sergio Paz en panel de conversación de @AmChamChile: “Chile se está quedando atrás y debe ver ejemplos internacionales del uso efectivo de blogs hechos por periodistas / profesionales de la comunicación” pic.twitter.com/mVnA4nR375
— FranOpazo (@lavidanomade) 5 de diciembre de 2017
Tal como dijo Leila Guerriero, periodista y escritora argentina:
Y para los profetas de lo nuevo, los cyberlotodos, los que aseguran que cualquiera munido de celular y su bloggito puede contar el mundo: la crónica de viaje es el ejemplo de que no todos pueden hacerlo. Donde «hacerlo» quiere decir hacerlo bien.
Lo mismo ocurre con el storytelling. Se requiere un profesional, y con profesional no me refiero a que escribir sea un trabajo exclusivo de periodistas, pero sí de aquellos que se han entrenado en el arte de mirar y escribir, escribir y encantar, ya sea en la universidad o a través de la experiencia profesional.
De hecho, Leila Guerriero nunca estudió periodismo ni literatura y es una de las escritoras más destacadas de su área en el país trasandino, con crónicas, columnas y reportajes a su haber.
En Chile aún estamos al debe en materia de marketing digital en promoción turística y en la implementación de herramientas que se alineen con los nuevos tiempos y usuarios 3.0. No son sólo las aerolíneas y grandes hoteles quienes deben poner atención, sino las pequeñas y medianas empresas y los destinos emergentes que buscan crecer y adaptarse a las necesidades del mundo digital.